En una publicación anterior, que puede verse aquí, hablamos acerca de cómo trabaja la extinción con espuma y cuáles son los beneficios de su instalación. En esta oportunidad, explicaremos cuáles son los tipos de espumas contra incendios que existen en el mercado, con el fin de que puedas identificar cuál es la más adecuada para proteger tu hogar o negocio dependiendo de las características del mismo. ¡No te pierdas esta información!
Las espumas contra incendios pueden clasificarse según la clase de fuego y/o de acuerdo con la capacidad de expansión de la espuma, así:
Las espumas de clase A se desarrollaron específicamente para controlar incendios forestales; sin embargo, ahora también se utilizan para otros incendios de clase A, como los incendios de estructuras.
En cuanto a su funcionamiento, este tipo de espuma disminuye la tensión superficial del agua, que humedece los combustibles, suprime el fuego y evita que se vuelva a encender.
Las espumas de clase B están diseñadas para líquidos inflamables (fuegos designados de clase B) y pueden ser espumas proteicas o espumas sintéticas. Las espumas de proteína contienen proteínas naturales y generalmente son biodegradables, mientras que las espumas sintéticas están hechas de agentes espumantes sintéticos. Estos incluyen espumas formadoras de películas acuosas resistentes al alcohol que, como su nombre lo indica, resisten los efectos del alcohol y forman una película protectora.
Las espumas resistentes al alcohol funcionan específicamente para crear una capa protectora entre la espuma y el material en llamas, lo que evita que los alcoholes en el material en llamas descompongan la espuma y la vuelvan ineficaz.
Las espumas AFFF son espumas de baja expansión. Tienen una baja viscosidad y un índice de expansión inferior a 20 veces. Esto significa que son móviles y pueden cubrir grandes zonas rápidamente.
En este sistema de lucha contra incendios, la proyección de la espuma es mayor, el efecto refrigerante es mejor y la resistencia al calor es superior.
Los sistemas más utilizados en este caso son:
La relación de expansión de las espumas medias es de 20 a 100, lo que las hace útiles para aplicaciones como incendios de plásticos, caucho y líquidos o para inundar zonas poco profundas.
Este medio ofrece un sistema único para transportar agua a zonas inaccesibles y cubrir rápidamente el líquido inflamable. Es eficaz tanto en interiores como en exteriores. Se recomienda para la supresión de humos o vapores tóxicos.
Los sistemas más comunes para distribuir esta espuma son:
Las espumas de alta expansión son mejores para áreas cerradas que deben llenarse rápidamente, ya que su tasa de expansión es superior a 200–1000.
Estas espumas están compuestas de burbujas secas llenas de aire. Se trata de una gran expansión para incendios “tridimensionales”. La espuma, en este caso, forma una barrera que protege de la radiación térmica del incendio, tanto a las estructuras como a los materiales.
Este sistema contra incendios está indicado para proteger locales y no lugares abiertos, porque la presencia de viento podría desplazar la espuma.
Los sistemas más comunes son:
Las espumas más empleadas son las mecánicas, las cuales son el resultado de la mezcla en idénticas proporciones de espuma, aire y agua.
En Prodeseg S.A, empresa líder en equipos contra incendios y seguridad industrial, contamos con un amplio portafolio de equipos de espuma contra incendios de calidad certificada.
Para conocer más acerca de nuestros productos, contáctanos haciendo clic aquí.
¡Gracias por leernos!
Fuente: Contraincendio
Te interesa: ¿Qué se debe hacer en caso de emergencia por incendio en una fábrica o industria?